
Rocío Rosado en Miel de Luna

En Miel de Luna, Rocío Rosado no es apta para todos los públicos. Se atreve a llevarnos de la mano por emociones muy intensas al encontrar las palabras de Lorca, con sólo voz y piano, con una poesía cargada de simbolismo. Rocío Rosado nos acerca desde su propia vida cantada a un Lorca librepensador, humanista, poeta contemplativo y sensible, lleno de fantasía y creatividad, que descubre desgarrado la realidad de las ciudades, y que crea un universo simbólico para los amores imposibles. Mai Kikuchi despliega un universo sonoro que engrandece a la voz cantada y a la propia poesía que se nos abre. Les acompaña Ágata Sandecor en una fotografía sobrecogedora de flores congeladas, que se hacen inmensas de la mano del saber técnico de Marcos Serna.